Este martes en Paraguay, él hoy mejor entrenador del mundo fue condecorado en la cumbre de los técnicos del continente por la consagración del título de mayor determinación y relevancia en la historia del club millonario. Sí, hasta el mismísimo presidente de la CONMEBOL, Alejandro Domínguez, sentenció: “Este reconocimiento es por ganar la copa más importante del mundo”.
Como siempre que declara, Marcelo Gallardo dejo varios títulos y cosas para analizar compartiendo su pasión por la profesión en la cual se ha vuelto un experto:
Un técnico versátil, que no se “casa” con nadie, que plantea los partidos en base a funciones y no a apellidos, que trabaja en silencio y con respeto desde el primer día en que llegó y se metió en el bolsillo a cada uno de los fanáticos del club de Nuñez.
Respetado por propios y ajenos, el hoy número uno del mundo en su rol recibió el trofeo de guerra que se merecía, ya que no pudo estar sentado en el banco en las épicas finales por una sanción que se le aplicó tras el partido con Gremio de Porto Alegre.
El Muñeco, como todos lo conocemos, sigue haciendo historia, mostrando su pasión por el club y generando admiración entre sus pares. Es quien le devolvió la identidad de juego y ese paladar negro al hincha millonario, y quien posicionó al club en la cima del fútbol mundial, ¡De pie por favor! ¡Y un aplauso a este caballero!
