Necesitábamos el triunfo para que no se nos sigan alejando los de arriba y lo conseguimos. Igualmente, nosotros ya habíamos ganado nuestro partido antes que la pelota empiece a rodar en el vede césped del Monumental.
Es que antes de subirnos a los colectivos que nos llevó a nuestro paraíso ya nos sentíamos complacidos porque, entre nuestros pasajeros, se encontraba Franquito, un nene de 11 años que como otros miles de chicos sueña con ser futbolista profesional. Y este pequeño delantero zurdo no nos acompañó sólo a ver al equipo del muñeco, sino que llevaba un bolso lleno de ilusiones ya que fue para quedarse durante toda la semana en la pensión del club y participar de diferentes pruebas que están llevando a cabo los coordinadores de las divisiones formativas.
Si llegará a ser una estrella del fútbol o será uno de los tantos jóvenes que quedan en el camino, lo dirá el tiempo. Pero a nosotros ya nos queda la satisfacción de haber hecho todo lo que estaba a nuestro alcance para poder ayudarlo, tanto a él como a su familia.
Además, como es habitual, compartimos y disfrutamos de un viaje ameno, que les permitió a unas 160 personas ir a alentar al millonario. En esta ocasión nos acompañaron amigos de Paraná, San Jerónimo Norte, María Grande, San Salvador, Santa Fe, Santo Tomé, Calchaquí, Esperanza, Rafaela, General Campos, Victoria, Crespo, Diamante, Federal, Gualeguaychú y Nogoyá, quienes regresamos más que contentos gracias al gol de Seba Driussi.
Como desde 1998, la Filial de River en Paraná trabajando para y por los hinchas del Más Grande. Ni en las buenas, ni en las malas…siempre.
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